Una nueva ley firmada el viernes por el Presidente Biden – conocida como Sami’s Law – ayudará a proteger la seguridad de los usuarios de populares aplicaciones de transporte compartido como Uber y Lyft.

La H.R. 1082, también conocida como Sami’s Law, exige a la Oficina de Responsabilidad Gubernamental que estudie y presente al Congreso un informe bienal en el que se detalle la incidencia de las agresiones a conductores y pasajeros de vehículos de alquiler.

Sami’s Law fue impulsada por el representante Christopher Smith (republicano de Nueva Jersey). Y lleva el nombre de Samantha Josephson, estudiante de la Universidad de Carolina del Sur, tras su trágica muerte en 2019.

Sami’s Law: una historia de conciencia y educación

Según el Departamento de Policía de Columbia, Josephson, de 21 años, llamó a un Uber después de una noche de fiesta en Five Points, en Columbia, Carolina del Sur. Subió a un vehículo que creía que era su transporte, pero en realidad era el coche equivocado. Josephson fue secuestrada y asesinada por el conductor de ese coche, Nathaniel Rowland.

La muerte de Josephson desencadenó una campaña nacional de concienciación sobre los peligros de los viajes compartidos y una oleada de medidas de seguridad reforzadas por parte de las principales empresas.

Sus padres crearon la Fundación “What’s My Name” para honrar a su hija, educar a las personas sobre la seguridad de los viajes compartidos y abogar por políticas que mejoren la seguridad de los usuarios de viajes compartidos. La Samantha Josephson Ridesharing Safety Act se convirtió en ley en Carolina del Sur en junio de 2019 y la Sami’s Law entró en vigor en Nueva Jersey, el estado natal de Josephson.

El representante estadounidense de Nueva Jersey, Chris Smith, y el senador Cardin presentaron el proyecto de ley en Washington en mayo de 2019, donde permaneció hasta finales del año pasado.

Con la firma del presidente, la Ley de Sami se convirtió en ley federal el jueves.