Esta semana, el gobierno del presidente Joe Biden empezará a denegar el asilo a los inmigrantes que se presenten en la frontera entre Estados Unidos y México. Ello sin haberlo solicitado antes por Internet. O sin haber buscado protección en un país por el que hayan pasado.

Con la finalización del Título 42 en los próximos días, la administración de Biden está tomando medidas más estrictas. El fin es disminuir la ola de migración de años recientes.

Entre las nuevas normativas, está incluido el denegar asilo a los inmigrantes que se presenten en la frontera terrestre. Especialmente sin antes haber intentado solicitarlo en alguno de los países de tránsito. O de forma legal y ordenada antes de salir de su país de origen.

Otra de las iniciativas es un plan para abrir 100 centros regionales de migración en todo el hemisferio occidental. El objetivo es facilitar la solicitud de asilo en países como Estados Unidos, Canadá o España. Todo ello comenzaría por dos centros ubicados en países tránsito como Guatemala y Colombia. No obstante, aún no está claro dónde estarían las otras ubicaciones.

La norma se anunció por primera vez en febrero y se está ultimando el miércoles, según los funcionarios. Es casi seguro que se enfrentará a desafíos legales.

Sin derecho a asilo: La frontera sur se prepara para un aumento récord de inmigrantes al finalizar el Título 42

Las ciudades fronterizas se preparan para una oleada récord de inmigrantes tras la expiración del Título 42 el 11 de mayo. Los funcionarios locales se sienten frustrados al ver cómo sus ciudades se ven desbordadas y se llenan de migrantes que viven en las calles.

Actualmente, alrededor de 24.000 agentes de las fuerzas del orden estaban destacados a lo largo de los 3.140 kilómetros de frontera con México. Sin embargo, se han enviado otros 1.500 militares en servicio activo para respaldar al Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos. A pesar de esta medida, estos funcionarios no interactuarán directamente con los migrantes.

 2.500 efectivos de la Guardia Nacional ya están siendo repartidos a lo largo de la frontera terrestre sur. Todos ellos encargados de ayudar a la CBP.

Biden dijo el martes que su administración estaba trabajando para que el cambio fuera ordenado. “Pero está por ver”, dijo a los periodistas. “Va a ser caótico por un tiempo”.